No es un secreto que la isla de La Palma es una de nuestras favoritas de entre todas las Canarias. La hemos recorrido de punta a punta en pareja y en familia. Y la hemos disfrutado mucho porque La Palma se vive, no sólo se visita. No es un destino de playa, sin más. Es una isla que ofrece multitud de opciones para todo tipo de viajeros, sobre todo para los más exigentes. Y cuando viajas con los más pequeños de la casa es bueno que el destino ofrezca variedad y diversión a partes iguales. La Palma con niños será un acierto seguro y para ponértelo fácil os contamos qué ver y hacer en familia en la Isla Bonita.
Mar de agua y de nubes
Empezamos por lo que más se espera de una isla: las playas. La Palma tiene muchas de arena y de rocas. Y aunque en las islas volcánicas se espera que las primeras escaseen o no sean muy buenas, La Palma es una clara excepción. De arena negra, eso sí, con la ventaja de que no es pegajosa. Además de que ninguna de sus playas está masificada, lo que se agradece enormemente. Podrás jugar, pasear, correr y hacer castillos en la arena sin ningún problema.
Destacamos en el este la playa de Los Cancajos, mi clara favorita. Coqueta, con sombrillas, chiringuito y hasta con un lago ideal para los más pequeños. También con un hándicap inevitable: el este es la zona más nubosa. Por ello, lo mejor es alojarse en el oeste y desde ahí moverse por el resto de la isla.
Allí la mejor playa es la de Tazacorte, muy amplia y con un parque en el mismo paseo, para que disfruten los más pequeños. Y muy similar también la de Puerto Naos.
Como complemento a sus playas, La Palma también tiene 2 piscinas naturales, Charco Verde y Charco Azul, donde podrás bañarte en el transparente agua de mar (¡y fresquita!) en un entorno que los niños disfrutarán mucho.
Y si hablamos de playas y mares en La Palma es inevitable hablar del Roque de los muchachos. Ésa es la verdadera foto de la isla porque os aseguro que os dejará con la boca abierta. Toca subir por una carretera de curvas. No muchos kilómetros pero os llevará más de una hora llegar a la cima. Una vez arriba, las nubes serán una alfombra blanco a vuestros pies. Un consejo: no esperéis hasta el final para hacer alguna paradita y fotografiar el paisaje. Y otro más, antes de subir, consultad las webcam de la isla para ver que el día está despejado y no hacer el viaje en vano.
Senderismo por bosques de cuento de hadas
Recomendamos visitar La Palma con niños porque nos parece una destino ideal para las vacaciones en familia. Pero no esperéis parques temáticos o acuáticos ni grandes centros de diversión. El disfrute viene del reencuentro con las cosas sencillas y con la propia naturaleza. No os olvidéis de que uno de los principales atractivos La Palma es el verde de sus paisajes.
Hay un montón de rutas de senderismo pero si vais con niños os recomiendo principalmente tres, que son más cortitas y alcanzables pero igual de mágicas e impresionantes.
El Mirador de la Cumbrecita, en plena Caldera de Taburiente, ofrece diferentes senderos, y miradores, algunos de ellos muy cerquita de la zona del aparcamiento. Eso sí, para llegar hasta allí hay que reservar así que no te olvides de hacerlo previamente. Elijas la ruta que elijas, la vista será espectacular. Una ruta asequible para hacer con niños es la que te lleva hasta el Mirador de las Chozas en un recorrido de poco más de 2 kilómetros (ida y vuelta).
Si piensas en bosques frondosos, de esos de los que hablan los cuentos, con altísimos y frondosos árboles y donde apenas se oye nada más allá del trinar de los pájaros tienes que incluir entre tus planes una ruta de senderismo en el Bosque de los Tilos y el Cubo de la Galga.
El primero es de sobra conocido y más visitado. Conocerlo es imprescindible si vas a La Palma. Un bosque de laurisilva, reserva de la Biosfera, que puedes visitar tranquilamente a pie. Si vas con niños pequeños, no hace falta que camines mucho recorriendo por ejemplo el pequeño sendero que en poco más de 10 minutos te llevará hasta una cascada, atravesando previamente un túnel para llegar allí. Sin duda los más peques lo disfrutarán mucho.
Sorprendentemente, poco se habla en las guías del Cubo de la Galga. A nosotros nos dejó igual de impresionados que el Bosque de los Tilos. En este caso, son once kilómetros que puedes acortar lo que quieras (como hicimos nosotros). Camines más o menos, el paisaje merece la pena. Y para quien llegue al final tiene una gran recompensa: contemplar un barranco lleno de gigantes helechos. Sin duda un regalo para la vista.
Si vas con niños, para en el aparcamiento y pregunta en la caseta de información, te dejarán continuar con el coche por el sendero y empezar la ruta un poco más adelante.
La Palma con niños: observación de estrellas y visita a volcanes
Para evitar la contaminación lumínica La Palama es la primera reserva starlight del mundo, protegida por ley, lo que la hace el escenario ideal para observar las estrellas, un plan diferente e ideal para disfrutar en familia.
Como también lo es la visita a los volcanes, en la zona sur de la isla. Allí, el paisaje cambia dejando un panorama prácticamente lunar, dando cuenta de la diversidad que ofrece La Palma. Y hasta podrás recorrer el cráter de un volcán una historia que seguro, contarán los peques cuando vuelvan al cole.
un rincón escondido: porís de candelaria
Quizá el recorrido no es el mejor para ir con niños pero el destino merece la pena. Bien podría tratarse del escondite pirata de los Goonies, pero hablamos de Porís de Candelaria. Un pueblecito literalmente enclavado en la roca, muy instagrameable.
Para llegar hasta él, tendrás que dejar atrás una estrecha carretera que lleva hasta el aparcamiento y después recorrer a pie un sendero en pleno barranco. De ahí la dificultad para los niños que tendréis que vigilar muy bien. Por contra, la distancia no es muy larga y tendrás como compañeros de viaje el intenso azul del mar y las rocas escarpadas de los acantilados.
colores y plataneras
Quizá lo más aburrido para los niños cuando hablamos de turismo es recorrer las ciudades. Pero os aseguro que esto no ocurrirá en La Palma.
La capital, Santa Cruz de la Palma, es de todo menos aburrida. Cuenta con barrios coquetos de casas bajas y adornadas por sus afamados balcones, que serán telón de fondo de muchas de las fotos familiares. Las calles están salpicadas por placitas, terrazas, y hasta por barcos y enanos. Todo forma parte de su historia y sus tradiciones. Para conocerlas, es muy recomendable hacer algunas de las visitas guiadas. Os hará conocer y disfrutar la ciudad de otra forma.
Los Llanos de Aridane también es visita obligada. Recorrerla a pie no os llevará mucho y en el durante podréis disfrutar de los murales urbanos y de las casas de colores.
Dos atracciones más muy recomendables para visitar la La Palma con niños. Las enormes plataneras en el norte y los faros, también al norte y al sur de la isla. Al menos algo que no se ve todos los días.
Como imaginarás, La Palma esconde otros muchos rincones para disfrutar con niños y en familia. Os hemos hablado largo y tendido de ello en artículos anteriores y también en Otiummadrid. Si aún así tienes cualquier duda, puedes contactarnos o dejarnos un comentario por aquí. Estaremos encantados de leerte.